Este año hemos preparado un poco de mermelada de majuelas (las bayas del espino albar, crataegus monogyna, que crece en estado silvestre por toda la peninsular ibérica.)
Despues de recogidas, lo primero es separarlas de sus hojas, las lavamos y ponemos a hervir con un poco de agua, que las cubra por completo, durante una media hora. Durante este tiempo absorberán todo el agua volviéndose más tiernas.
Una vez cocidas tenemos dos opciones; prepara jalea, dejando de un día para otro escurriendo el líquido en un colador o gasa. Quedarán sin pasar, las semillas y la pulpa. Después añadiremos a ese líquido el azúcar necesario en función de lo dulce que suelas preparar las jaleas (desde un tercio del peso del líquido, hasta el mismo peso del líquido) y el zumo de limón y dejaremos cocer hasta conseguir la textura deseada.
Al igual que con la jalea, después de filtrarlo, añadiremos a ese puré el azúcar necesario en función de lo dulce que suelas preparar las mermeladas (desde un tercio del peso del líquido, hasta el mismo peso del líquido) y el zumo de limón y dejaremos cocer hasta conseguir la textura deseada.
Una vez listo, envasamos como de costumbre. La consumimos en pocos días si hacemos poca cantidad y no queremos envasarla al vacío.
Y vosotros ¿la habéis preparado alguna vez?